No siempre el espejo muestra toda nuestra belleza. A veces, hay que cerrar los ojos para lograr verla. Deja de menospreciarte. ¡Tú eres más increíble de lo que imaginas!
Si caminas por la vida encontrándote muy poca cosa, y crees que no tienes valor alguno para el mundo, estás completamente equivocada. Todos nacemos con singular especialidad, lo que pasa es que algunas personas se olvidan de su propio valor.
El don de la vida no viene solo, junto con la vida, traes una amplia gama de dones y virtudes que están allí, dentro de ti, esperando a ser descubiertos y valorados por lo que representan: ¡la magia de existir!
Encontrar nuestro propio valor y nuestro lugar en el mundo empieza por la hermosa tarea de amarnos a nosotros mismos.
Deja de menospreciarte porque ¡eres increíble!
Y si no estás de acuerdo conmigo, debe ser por alguno de estos motivos que te presento a continuación, y que están afectando seriamente tu percepción de ti misma, así que valóralos y abre los ojos al maravilloso ser humano que en realidad eres.
1. Estás caminando con las personas equivocadas
Muchas veces, estamos rodeados de personas con mala energía, que se aprovechan de nuestra fragilidad para desvalorizarnos con insultos sutiles o un tratamiento agresivo. Y eso nos hace sentir una basura, pero no somos basura. ¡Aléjate de ellas!
Deja de menospreciarte, aléjate de personas tóxicas que contaminan tus espacios, y por el contrario, comparte con aquellas personas que te alimentan emocionalmente, elevando tu energía hacia lo positivo para lograr lo que quieras.
2. Te enfocas en tus defectos:
Tienes que parar de mirar sólo a tus defectos. No te culpes por no ser perfecta. Tus fracasos no te hacen un cero a la izquierda. Mira tus cualidades. Si tú crees que no tienes ninguna, estás equivocada. Sólo no estás practicando lo que mejor sabes hacer.
Deja de menospreciarte y comienza a amarte a ti misma, y a valorar tu existencia. Agradece tu vida y lo que te acompaña, agradece el ser humano excepcional y maravilloso que con seguridad eres. No tienes que ser perfecta para beneficio de nadie, tienes que ser amada para tu propia bendición.
3. Tienes una visión distorcionada de ti misma:
La forma en que llegamos al mundo y el medio en que vivimos pueden distorsionar nuestra autoimagen. Nos vemos como alguien ignorado por las personas y sin valor para el mundo. Pero como todos, tú también tienes una importancia única para el universo. Sólo tienes que ver y aceptarlo.
«Somos hijos de la vida, hijos del creador, somos el milagro más maravilloso que DIOS se ha dado el lujo de crear»
Tu existencia no es casual. Eres una pieza muy importante de la creación, y con seguridad, si tu no existieras habría muchas cosas que el universo no podría llevar a cabo. Formas parte de la danza de la vida, y sin ti en este momento presente, la vida no sería la misma.
4. Estás sofocada por las adversidades de la vida:
Son tantos los procesos de nuestras vidas que, a veces, nos sentimos impotentes ante las duras adversidades, al punto de creer que el problema es la gente misma. Por eso no dejes que un mal momento te haga sentir una porquería. Son cosas diferentes. Incluso en la dificultad, tú todavía eres increíble!
Aliéntate a ti misma, tu fuerza es inmensurable. Utilízala para levantarte y continuar con todas tus ganas porque el mundo te pertenece.
5. Te sientes derribada por las frustraciones:
Cuando tenemos ojos sólo para aquello que no somos o no conseguimos, pasamos a creer que no valemos nada. Entonces, no sufras por lo que no posees. En su lugar, se agradecida por lo que sí tienes.
Agradecer la vida y todo lo que nos trae, y que tenemos aquí, en el presente, es un gran paso para comenzar a mirarnos con otros ojos. Saber que estás, y que tienes algo importante que realizar en esta vida, ya te da la suficiente valía.
6. Te embarga un sentimiento de soledad
El mundo anda muy rápido y bastante egoísta para creer que la soledad es una cuestión particular nuestra. No siempre estamos solos porque nadie quiere nuestra compañía. A veces, es falta de tiempo, otras, falta de alguien en quien confiar o con quien sentirse cómodo.
Cultiva relaciones sanas. Las amistades son a veces una muy buena opción para compartir un rato agradable y bondadoso, que nos recuerda que no estamos solos en este mundo.
Los cambios en nuestra vida, sean por voluntad propia o forzosos; son necesarios para ayudarnos a abrir los ojos, mirar, y valorar lo que tenemos, en contraste con aquello que en nuestros corazones sabemos que merecemos. Y, sabemos que merecemos lo mejor de lo mejor.
7. Sufriste un rechazo:
Ser rechazado por quien amamos, ser despedido de un trabajo, ser olvidado o engañado por alguien puede hacer bajar nuestra autoestima. Pero un acto en sí no define quiénes somos y mucho menos tiene control sobre nuestra felicidad. Cree: eres mayor que cualquier rechazo.
Aprende a ver éstas circunstancias como nuevas oportunidades para explorar mundos nuevos. Recuerda que quien verdaderamente te ama, no te rechaza, te abraza. Verte obligada a cambiar de empleo te brinda la oportunidad de explorar nuevas alternativas y conocer gente nueva y fresca, que puede traer mucho bienestar a tu vida. Así que ¡arriba esa autoestima tuya!
8. No ves que acumulas muchas cualidades:
A menudo, ser generoso, trabajador, inteligente o tener cualquier otra cualidad es una cosa tan natural, que no somos capaces de vernos como una persona especial, y luego creemos que no somos un gran problema. Eso no es más que un auto engaño.
Para y escucha por un momento a las personas que te admiran. Ellas tienen mucho que decir sobre la persona increíble que tú eres. Pueden ver más cosas buenas en tu alma que tú misma.
Esto es porque eres más fuerte de lo que pareces, más valiente de lo que crees, más inteligente de lo que piensas y mucho más amada de lo que jamás lograrás entender, ni siquiera al cerrar los ojos lograrás ver lo magnífica que eres. Así que deja de menospreciarte y comienza a amarte con plenitud.
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