Todos iniciamos una relación sumergidos en el mar de la felicidad, y con un fuerte sentimiento de prosperidad que nos abruma a veces, sin embargo, a pesar de toda esa efervescencia, es necesario estar atentos a los enemigos del amor.
Cada uno de nosotros tiene su propia visión del amor. Algunos lo vemos como una energía poderosa, algunas personas asocian el amor con alguien especial y hay todavía aquellos que se concentran en apenas sentirlo.
No importa cuál sea tu visión del amor, este sentimiento es uno de los más potentes que se nutren y es el único capaz de mantener dos corazones unidos, independientemente de las circunstancias.
Los 7 grandes enemigos del amor:
Cuando dos personas se aman verdaderamente y deciden compartir sus vidas, algo mágico sucede y el mundo se vuelve más colorido y feliz. Sin embargo, no todo es un mar de rosas. El amor viene con desafíos constantes, y necesita ser cuidado y fortalecido todos los días, en todas las circunstancias o, poco a poco, comienza a perder el sentido, alejando a las dos personas y llevando a sentimientos de rechazo y alejamiento.
Todo amor tiene 7 grandes enemigos principales, que necesitan ser combatidos todos los días para que la relación se vuelva cada vez más feliz y próspera. Echa un vistazo a estos enemigos abajo.
1. Egocentrismo:
Muchas veces tenemos la tendencia a creer que el mundo gira a nuestro alrededor y que las cosas deben ser de nuestra manera. Sin embargo, ese pensamiento no lleva una relación muy lejos. Es necesario comprender que las personas tienen sus propios deseos, sueños y objetivos, y que si nos enfocamos sólo en nosotros mismos, nunca conseguiremos crear una realidad feliz junto a la persona que amamos.
Nuestra pareja es también un ser humano con criterio propio, el cual merece ser tomado en cuenta, considerado y respetado.
Planear estrategias de manipulación para conseguir que el otro actúe a nuestro gusto, es una acción propia del egocentrismo, y un seguro enemigo del amor, que puede ser reemplazada por comunicación efectiva, sinceridad en expresar lo que deseamos hacer, y confianza en que tu pareja te apoyará.
2. La ausencia de perdón:
Nuestro compañero se equivoca porque es imperfecto, al igual que nosotras. Si nos ponemos a disposición de vivir una relación, debemos ser capaces de perdonar a la otra persona, porque si no lo hacemos, la relación va a llegar a ser tóxica, llena de resentimiento y energías negativas. El perdón hace bien a nosotros mismos y a todo a nuestro alrededor.
En pareja, es necesario alimentar las virtudes de comprensión y compasión. Aprender a tomar el lugar del otro, antes de realizar un juicio donde tu eres el juez y el jurado, y tu pareja será la victima encontrada culpable. El nivel de responsabilidad con nuestros juicios, debería siempre mantenerse acorde con el nivel del compromiso que asumimos el día que se inició la relación.
3. La mentira:
Mentiras, sean «grandes» o «pequeñas», siempre serán parte de los enemigos del amor. Debilitan la conexión con la otra persona y nos hacen perder la credibilidad en nuestras relaciones. La confianza es uno de los principales pilares de las relaciones y no pueden existir en un ambiente donde la mentira predomina.
La honestidad, la sinceridad, forman parte de las bases bajo las cuales se inicia una relación de pareja.
Es importante cultivar estos valores, practicarlos en amenas conversaciones donde ambos integrantes puedan darse al otro con absoluta confianza, y de esta forma evitar caer en situaciones negativas generadas por mentiras. En una relación de pareja no caben las mentiras.
4. Coodependencia:
Algunas veces, las personas entran en relaciones, no por realmente amar a otra persona, sino porque ella puede ofrecerles algo que necesitan, satisfacer alguna necesidad. Cuando esto sucede, el amor no es el foco, ni el objetivo, y la gente sólo se lastima.
Aprender a identificar las señales de que tu posible pareja está motivada por algún interés alejado del amor, puede que no sea fácil, sin embargo, tiene mucha importancia antes de dar el paso final, ya que las uniones por intereses al margen del amor, el bienestar y la felicidad, resultan muy dolorosas para quién es utilizado.
5. La mala comunicación:
La mala comunicación o falta de comunicación perjudica las relaciones y es parte de los enemigos del amor. Es a través del diálogo que nos comunicamos con la otra persona, informamos nuestras necesidades, establecemos objetivos, definimos metas de vida. Sin diálogo no existe relación.
Escuchar a nuestra pareja es igual de importante que hacer que nos oigan, transmitir nuestros deseos, nuestras inquietudes y nuestros objetivos, es muy necesario para que haya equilibrio en la relación de pareja.
Compartir necesidades y unirnos para lograr lo que queremos, contribuye a profundizar la relación.
6. Malos tratos:
A nadie le gusta ser maltratado. Entramos en relaciones para ser feliz junto a otra persona, a no ser manipulado o sentir más tristeza que alegría.
Convertirnos de forma consciente en victimas del mal trato, y permanecer unidos a quién nos lastima insistentemente es muy dañino para nuestra autoestima. Cuidar nuestra integridad emocional y física es una tarea de cada uno, pero en una relación de pareja, cuidar esa misma integridad emocional y física es tarea de ambos. Lo ideal es mantener el respeto, la honestidad y la comprensión.
7. Necesidad constante de cambiar al otro:
El amor es aceptar y amar a la otra persona como ella realmente es, y no tratar de moldearla a alguien que no es, sólo para satisfacer nuestra voluntad. Si sientes la necesidad constante de cambiar a otra persona, es porque no la amas de verdad.
Sabemos que el sólo hecho de ser géneros diferentes, ya involucra una gran diferencia. Cuando iniciamos una relación por lo general sentimos y creemos que nuestra pareja es especial. Valorar sus virtudes forma parte de las causas que nos motivan a unirnos, pero concentrarnos en sus defectos, que todos tenemos, y pretender cambiarlos en lugar de aceptarlos y lograr una unión de sana convivencia, es ciertamente muy negativo para la permanencia.
Estos son sólo algunos de los enemigos del amor, que nos impiden crecer y prosperar del lado de la persona que amamos. Evita estos comportamientos en tus relaciones y prioriza el compañerismo, el altruismo y la voluntad de hacer que las cosas sean cada vez mejores. Cultivar relaciones de pareja centrados en el amor mutuo, la honestidad, el respeto y la comprensión, fortalece la autoestima de los miembros de la pareja y logra crear uniones a largo plazo.
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